Texto y Fotografías: Orlando Bautista Villegas
"La meditación es una aventura; una aventura hacia lo desconocido, la mayor aventura que la mente humana puede acometer. La meditación consiste simplemente en ser; ser sin hacer nada, sin acción, sin pensamiento, sin emoción. Simplemente eres, y ello es puro gozo. ¿De dónde viene ese gozo si no estás haciendo nada? No viene de ninguna parte, o viene de todas partes. No tiene causa, ya que la existencia está hecha de esa sustancia llamada gozo."
Con estas palabras inicia el libro de Osho sobre meditación intitulado La primera y última libertad, Guía práctica para las meditaciones, en el cual se incluyen aproximadamente sesenta propuestas meditativas.
De acuerdo con Osho la meditación es cuando no se hace nada, ni a nivel mental ni corporal y "toda actividad ha cesado". Para ello, no es necesario mucho tiempo, tan solo un instante es suficiente. Y una vez descubierto el truco será posible permanecer en dicho estado tanto como se guste.
Posteriormente será posible empezar a hacer cosas y "permanecer imperturbable". Osho sugiere empezar por pequeñas acciones manteniéndose centrado para posteriormente hacer cosas de mayor complejidad, inclusive escribir o hablar ante un público.
El desarrollo de la capacidad de observar es importante para la meditación. En realidad lo que se observe no es lo importante. Para ello, se requiere estar alerta y consciente. Y cualquier actividad que se realice -insiste Osho- puede ser meditación siempre y cuando se haga alerta.
Un punto a tomar en cuenta para empezar a ser consciente es la observación del cuerpo: ir poco a poco tomando consciencia de cada movimiento. El siguiente paso es observar los pensamientos. Sugiere escribir durante diez minutos todos ellos para cultivar esta consciencia ya que al no hacerlo "toda esta locura nos arrastra como una corriente de fondo. Afecta todo lo que haces y a todo lo que no haces; afecta a todo".
El simple hecho de observar empieza a cambiar todo. En consecuencia los pensamientos, afirma Osho, se harán mucho más ordenados, lo cual constituye una base para el siguiente estadío que consiste en estar más consciente de los sentimientos, emociones y estados de ánimo.